Para percatarse del poder de seducción de los teléfonos inteligentes basta con revisar algunas cifras. El número de usuarios de smartphones supone actualmente más de la mitad del total de usuarios de teléfonos móviles en el mundo, los cuales adquirieron en 2018 alrededor de 1.600 millones de terminales por un valor de ventas cercano a los 479.000 millones de dólares. Estos ingresos fueron a parar, en gran parte, a manos de las tres empresas que mejor están sabiendo sacar tajada de este fenómeno: Samsung, Apple y Huawei.
En España el mercado de los smartphones sigue un desarrollo similar al del resto del mundo. Samsung, Apple y Huawei reinan en los hogares equipados con terminales de telefonía móvil, sean estos smartphones o no. Aunque, eso si, a Apple le ha salido un duro competidor en el mercado nacional: BQ.
Si se atiende a las ventas por sistema operativo, los usuarios se decantan, de forma aplastante, por los dispositivos Android frente a los iOs.
Llegados a este punto, cabe preguntarse para qué se utiliza un smartphone en España. Este dispositivo está tan presente en la vida de los españoles que ha llegado a convertirse en el método de conexión a Internet favorito. Concretamente, más de dos horas pasan los usuarios de smartphones pegados a su dispositivo, tiempo durante el cual ven vídeos online, revisan su correo electrónico, envían mensajes o visitan su perfil en las redes sociales. Eso sí, algo más reacios se muestran respecto a las compras online, actividad para la cual siguen optando por otras opciones más convencionales.