Factores como la inflación y la conciencia ecológica están cambiando la mentalidad de cada vez más personas que se animan a comprar productos usados sin complejos. Además, sitios web y aplicaciones como Wallapop o Vinted, que posibilitan la compraventa entre particulares, han contribuido también al auge del mercado de segunda mano.
Los datos de la macroencuesta Statista Consumer Insights confirman que este mercado cuenta con cada vez más adeptos en muchos países. Por ejemplo, en la India, el porcentaje de encuestados que adquirieron algún producto de segunda mano en el último año pasó del 36% en 2019 al 60% en 2022/2023.
Países europeos como Francia y Alemania también han visto aumentar significativamente el porcentaje de aficionados a las compras de segunda mano en este periodo de cuatro años, siendo en 2022/2023 el 57% y 55% de encuestados, respectivamente, los que declaraban haber comprado algún artículo usado. Aunque en Corea del Sur esta práctica sólo atrajo a menos de cuatro de cada diez encuestados este año, lo cierto es que cuenta con más adeptos que hace cuatro años.