En diciembre de 2020, había en todo el mundo 274 periodistas encarcelados por motivo de su trabajo, según datos del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés). Esta cifra supera el máximo de 272 registrado en 2016, siendo la más alta desde que la entidad empezó a recopilar estadísticas a principios de la década de 1990.
Como muestra el siguiente gráfico, China, con 47 periodistas presos, sobre todo en la región autónoma de Xinjiang, se destaca como el estado que más periodistas tiene encarcelados. Turquía ocupa el segundo lugar, con 37. Ambos países se han disputado constantemente el poco envidiable título de mayor carcelero de periodistas del mundo. En consonancia con la consolidación del control del país por parte del presidente Xi Jinping y la aplicación de controles más estrictos sobre los medios de comunicación, China ha seguido encarcelando a informadores y ha pasado a ocupar la primera posición desde 2019. Las detenciones han continuado en el marco de la cobertura del brote del coronavirus en Wuhan.
En general, los detenidos se concentran en Oriente Medio, África y Asia, junto a algunos países como Rusia. En el listado no aparece ningún arrestado en el continente americano, en Europa Occidental ni en Oceanía.
Respecto a los profesionales de los medios de comunicación asesinados debido a su labor periodística, como vimos en este gráfico, el número ascendió a 54 en 2020, mientras que este año, hasta el 1 de noviembre, Reporteros Sin Fronteras había registrado 39 asesinatos.