Y es que, dada la situación, muchas fueron las personas desempleadas que decidieron dar el salto al mundo empresarial y abrir su propio negocio. De esta forma, la mayoría de las compañías sin asalariados llevaban de cero a un año en el mercado en 2016. Asimismo, casi 1,8 millones de un total de cerca de 3,2 millones de empresas no tenían ningún empleado y la condición jurídica de más de la mitad era la de "persona física".
Es decir, España es un país de PYMES y autónomos. Pero también cuenta con grandes corporaciones como son Repsol y la cadena de supermercados Mercadona. Esta última ocupó en 2018 los primeros puestos en todos los rankings de facturación nacionales tras superar los 22.000 millones de euros. Si atendemos a las ventas por segmentos de mercado, los sectores de más éxito en España fueron el comercio minorista no especializado, seguido del comercio mayorista de combustibles en todas sus formas. En cuanto al aspecto geográfico, las empresas con sede en Madrid fueron las que mayor volumen de ventas registraron, seguidas de las situadas en Barcelona y Valencia.