La industria logística en el mundo - Datos estadísticos
La logística y el transporte han vivido tiempos tumultuosos desde 2020, con una pandemia y una guerra entre Rusia y Ucrania que han ejercido una fuerte presión sobre las cadenas de suministro a nivel mundial, obligando en muchos casos a importantes reestructuraciones operativas. Hoy en día, el sector sigue aún experimentando los efectos de la normalización del comportamiento de los consumidores y los prolongados problemas de capacidad, al tiempo que la economía se ralentiza y tanto el flete aéreo como marítimo son castigados por la corrección de la demanda de bienes de consumo. Todo esto se ha traducido en un descenso de la curva de crecimiento del negocio. Pese a ello, la industria logística alcanzó un valor de más 10 billones de dólares en 2022 y se espera que registre una tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR) superior al 5% durante el próximo lustro. De una gran parte de estas cifras es responsable el mercado asiático, cuya posición de liderazgo se atribuye a la expansión de las rutas comerciales y al traslado de la producción industrial a los países de la región.
Por otro, el transporte marítimo de contenedores, que había experimentado un crecimiento sin precedentes en 2021 y 2022 con beneficios récord para los transatlánticos, también acusa ciertos achaques. El descenso del gasto en bienes de consumo, enmarcado dentro de un fuerte escenario inflacionista, ha generado una bajada de los fletes al contado en las principales rutas comerciales.
En cuanto al almacenamiento de mercancías, se espera menor demanda en 2023 que en años previos, lo que sumado al bloqueo de las tarifas más altas y su vencimiento durante 2023, conduce a una inexorable reducción de las ganancias a corto plazo.
Expansión del comercio electrónico y la logística de última milla
Impulsado por el viento a favor de las ventas online mundiales , el mercado de la logística para comercio electrónico ha experimentado un crecimiento sin precedentes, incrementando su tamaño de mercado un 34% entre 2020 y 2022. Los grandes nombres vinculados al transporte de mercancías, como Møller-Maersk, COSCO Shipping o United Parcel Service (UPS), han sido los mayores beneficiados de esta ola comercial cibernética, pero no los únicos, ya que la presión y la incapacidad de los proveedores tradicionales de 3PL para satisfacer la demanda de soluciones de cumplimiento directo global ha abierto la veda a nuevos operadores en el sector, especialmente dentro de las áreas de 5PL, eFulfillment y servicios de último kilómetro. Asimismo, cabe destacar la multiplicación de los establecimientos de paquetería, de los que se contabilizan más de 1,2 millones de puntos distribuidos por todo el planeta.Transporte aéreo y marítimo, los más fustigados
Sin embargo, el transporte aéreo y marítimo no han sufrido la misma suerte. Por un lado, la recuperación de la normalidad trajo consigo un revés para el transporte aéreo de mercancías tras unos años muy rentables para la carga aérea, principalmente debido al intento de reducir los costes mediante el uso del transporte marítimo (una vez resueltos los problemas en la cadena de suministro) y a la contracción de la demanda de productos de consumo de alto valor y perecederos, que son los que conforman la mayor parte de la mercancía movilizada por avión. Solo el tráfico de pasajeros ha evolucionado de forma positiva, recuperando e incluso superando los volúmenes prepandémicos.Por otro, el transporte marítimo de contenedores, que había experimentado un crecimiento sin precedentes en 2021 y 2022 con beneficios récord para los transatlánticos, también acusa ciertos achaques. El descenso del gasto en bienes de consumo, enmarcado dentro de un fuerte escenario inflacionista, ha generado una bajada de los fletes al contado en las principales rutas comerciales.
En cuanto al almacenamiento de mercancías, se espera menor demanda en 2023 que en años previos, lo que sumado al bloqueo de las tarifas más altas y su vencimiento durante 2023, conduce a una inexorable reducción de las ganancias a corto plazo.
