Las muertes por infecciones a causa de la resistencia a los antimicrobianos (RAM) se dispararán de aquí a 2050, según un informe de la ONU. En 2020, 1,27 millones de muertes se atribuyeron directamente a esta causa en todo el mundo. Como muestra el siguiente gráfico, las infecciones resistentes a los antimicrobianos (comprende antibióticos, antivirales, antfúngicos y antiparasitarios) podrían matar hasta 10 millones de personas en sólo tres décadas, al mismo nivel que el número de muertes por cáncer en 2020.
La RAM (o farmacorresistencia) se produce cuando los microorganismos (sean bacterias, virus, hongos o parásitos) sufren cambios que hacen que los medicamentos que se usan para curar las infecciones dejen de ser eficaces.
Por regiones, se prevé que Asia registre el mayor número de muertes relacionadas con la RAM por cada 10.000 habitantes en 2050 (4,73 millones), seguida de África (4,15 millones), América Latina (392.000), Europa (390.000), América del Norte (317.000) y Oceanía (22.000).
Según el informe, la RAM también "exacerba las desigualdades dentro de las sociedades", por lo que las mujeres, los niños, los inmigrantes, los refugiados, las personas empleadas en sectores como la agricultura o la sanidad y quienes viven en la pobreza serán especialmente vulnerables a las infecciones farmacorresistentes.