Las previsiones ya apuntaban a que Pfizer cerraría un gran 2021, y así lo ha hecho, según los resultados correspondientes al pasado año hechos públicos por la farmacéutica este martes. La compañía estadounidense obtuvo un beneficio neto de 21.980 millones de dólares y unos ingresos de 81.290 millones en 2021, gracias sobre todo a su vacuna contra la COVID-19.
BNT162b2 o Comirnaty, nombre comercial de la vacuna, representó el 45% de los ingresos de Pfizer el año pasado, empequeñeciendo cualquier otro medicamento de la amplia cartera de la compañía. Pfizer, que desarrolló la vacuna en cooperación con la empresa biotecnológica alemana BioNTech, fabricó más de 3.000 millones de dosis de la vacuna de ARNm el año pasado, que acabaron aportando 36.800 millones de dólares a los ingresos récord de la empresa.
Para 2022, la multinacional estadounidense prevé 32.000 millones de dólares en ventas de su vacuna Comirnaty, además de 22.000 millones de dólares en ventas de Paxlovid, su medicamento antiviral oral contra la COVID-19. Ambas estimaciones se basan en los contratos que el laboratorio tenía firmados a finales de enero, por lo que las cifras podrían ajustarse al alza en el transcurso del año.