La razón de este claro liderazgo no es otra que Estados Unidos. Y es que el país de las oportunidades acumula actualmente casi el 43% del mercado farmacéutico global, mientras que China, en segundo lugar en la clasificación, no llega ni siquiera al 8%. Y ello a pesar de que no fue, ni mucho menos, la nación que mayor crecimiento experimentó en este sentido en 2022.
Principales empresas farmacéuticas y los productos estrella
Ante este panorama, que muchos de los principales grupos farmacéuticos hayan nacido en la nación presidida por Joe Biden no resulta una sorpresa. Una de ellas es Pfizer, que parece estar ligeramente por delante del resto, al menos en lo que a ventas se refiere, con una cuota de mercado próxima al 10%. A fin de cuentas, estuvo detrás de la vacuna contra la COVID-19 más distribuida –únicamente en la Unión Europea supuso más de 70% de las dosis inoculadas-, que además se convirtió en el fármaco más vendido en 2022 al generar globalmente cerca de 56.000 millones de dólares estadounidenses. Pero este no fue el único de sus productos que logró entrar en el top 10. En concreto, otros dos acompañaron a Comirnaty en la clasificación, lo que sin duda contribuyó a que cerrara el año con la facturación más elevada dentro de las empresas dedicadas de forma exclusiva al desarrollo y fabricación de medicamentos. Eso sí, si se considera también la biotecnología, pierde dicha posición en favor de su compatriota Cardinal Health, que prácticamente duplicó los ingresos de la compañía neoyorquina durante el último año.Johnson & Johnson, Merck & Co. y AbbVie son otros de los nombres que cabe mencionar, sobre todo porque a pesar de no contar con las mismas entradas de dinero que Pfizer, tienen una mejor actuación en bolsa que su rival. Es más, la capitalización bursátil de todas se situó por encima del umbral de los 250.000 millones de dólares en 2023, sobrepasando incluso los 374.000 millones en el caso de la primera de ellas. En cuanto a Viejo Continente, su peso en el sector, si bien notablemente inferior al del mercado norteamericano, no es para nada irrelevante y empresas como Novartis, AstraZeneca, Sanofi y Roche son la prueba de ello. En especial estas dos últimas, cuyos biorfármacos como Dupixent –para tratar la dermatitis atópica, el asma y rinosinusitis crónica con pólipos nasales- o el tratamiento para la esclerosis múltiple Ocrevus aparecen anualmente entre los más exitosos.
