A pesar de las numerosas sanciones impuestas a Rusia desde la invasión de Ucrania, los diamantes del país siguen fluyendo libremente hacia la Unión Europea. Como muestra este gráfico con datos del Banco Nacional de Bélgica, aunque el valor comercial había disminuido significativamente en agosto de este año, se registró un gran pico en junio —cuatro meses después del inicio de la guerra— cuando se importaron a Bélgica diamantes desde Rusia por un valor de casi 400 millones de euros.
Según informa The Guardian, Bélgica es el único país de la UE que importa un volumen significativo de diamantes de Rusia. Si bien el propio país afirma que no bloquearía una prohibición, hasta ahora los diamantes han eludido la lista de sanciones una y otra vez, pese a los llamamientos del presidente ucraniano Volodímir Zelensky, que en marzo afirmó en un discurso ante el Parlamento belga que la paz valía “más que cualquier diamante”.