Tras más de año y medio de pandemia, no cabe duda de que ésta ha tenido un importante impacto en la salud mental de las personas en general y, en particular, en la de los grupos poblacionales más vulnerables.
Según un estudio publicado por Ipsos, llevado a cabo entre mayo y junio de este año en 29 países, los efectos a largo plazo en la salud mental y el bienestar constituyen el mayor impacto que la pandemia ha supuesto en los menores de 18 años. Así lo piensan el 37% de los encuestados, que considera que este suceso repercutirá en los menores empeorando su salud mental y bienestar, seguido de un descenso en las calificaciones académicas (35%) e incluso unas mayores tasas de desempleo y pérdida de ingresos (30%).