Quienes trabajen en Jordania o Filipinas tienen más probabilidades de tener como jefe a una mujer que a un hombre, pues en estos países el 60,3% y el 53%, respectivamente, de los puestos directivos están ocupados por mujeres. Así lo indican los datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que también muestran que solo seis de los más de 90 países y territorios que reportaron sus cifras en 2020 y 2021 a este organismo de las Naciones Unidas han logrado la paridad de género en los puestos de liderazgo.
Como muestra este gráfico, el porcentaje de mujeres directivas varía mucho entre países y regiones del mundo. En Europa, por ejemplo, Rusia tiene una proporción de mujeres en puestos directivos de empresas y organizaciones del 45,7%, mientras que la proporción es inferior en países como Suecia (42,3%), Francia (35,5%), España (35%) y Alemania (28,1%). En América Latina destaca El Salvador, que cuenta con un 46,7% de mujeres directivas. México (38,5%) y Brasil (36,8%) mantienen proporciones similares, mientras que en Argentina (33%) y Chile (30,4%) la proporción es inferior.
La OIT señala que es más probable que las mujeres ocupen puestos directivos en recursos humanos, administración, finanzas, marketing o relaciones públicas, áreas que la organización define como funciones de apoyo en la empresa.