En muchos países, una de las preocupaciones principales sobre la epidemia del SARS-CoV-2 y por la que se ha restringido la libertad de movimientos es el temor de no contar con la capacidad de atender a todos sus afectados en estado grave. Y es que los sistemas de salud cuentan con infraestructuras de cuidados intensivos que no están preparadas para un volumen de contagios como el que estamos presenciando.
Esta infografía de Statista muestra el número de camas de cuidadanos intensivos en una selección de países en el último año disponible, según los datos del Centro Nacional de Estados Unidos de Información sobre Biotecnología y de las revistas Intensive Care Medicine y Critical Care Medicine.