Principales emisores de migrantes
Marruecos y Perú son dos de los ya tradicionales países de origen de gran parte de los extranjeros residentes en España que siguen jugando un papel preponderante en lo que a emisión de inmigrantes y permanencia de los mismo en el país se refiere. Ahora bien, hay otras comunidades que están creciendo de forma rápida, como por ejemplo la colombiana, que aumentó su tamaño considerablemente en tan sólo un año. En el lado opuesto se sitúan tres países que hasta hace poco lideraban la lista de emisión de emigrantes —Ecuador, Bulgaria y Rumanía—, cuya presencia se ha visto reducida ligeramente en el país.
Paralelamente a la inmigración regular se desarrolla otro fenómeno nada fácil de controlar, el de la inmigración ilegal, que trae de cabeza a los gobiernos tanto de los países de origen como de destino. Y es que hace menos de un lustro, en 2018, las cifras oficiales de llegadas a España de inmigrantes ilegales batieron todos los récords. Como era de esperar, Canarias y Baleares son dos de las zonas mas afectadas por la llegada de embarcaciones repletas de personas que se lanzan al mar desesperadas en búsqueda de un destino mejor.
Una tarea pendiente: la integración
Ya se trate de emigrantes legales o ilegales, una cosa es clara: la integración y el acceso a un trabajo con unas condiciones dignas no es tarea fácil, aunque la situación haya mejorado con los años. De esta forma, una parte importante de los estudiantes matriculados en las universidades españolas provienen de la Unión Europea, países de América Latina o África y cerca de la mitad de los extranjeros residentes en España han logrado incorporarse al mercado laboral, ya sea por cuenta ajena o propia.
Asimismo, la inmigración ha ido ganando protagonismo también en la vida pública. Principalmente artistas y deportistas con raíces extranjeras han conseguido hacerse un hueco en el panorama nacional, convirtiéndose en referentes de integración. Nombres como Isabel Preysler, Alaska, Ana de Armas, Messi, Buika, Francine Gálvez, Lucrecia, Donato o Ilias Fifa son claros ejemplos de que ser inmigrante o hijo de inmigrantes no ha de suponer un freno para el triunfo profesional y/o personal. Sin embargo, el racismo y la xenofobia gozan todavía de un cierto arraigo en España. Según los últimos datos oficiales facilitados por el Ministerio del Interior, en 2020 se contabilizaron un total de 485 delitos relacionados con el racismo y la xenofobia. En valores relativos, esto significa que más de una tercera parte de los delitos de odio registrados en el país estaban englobados dentro de esta categoría.