Obesidad y sobrepeso en América Latina y el Caribe - Datos estadísticos
Aunque ningún país de América Latina y el Caribe figura entre los diez primeros del mundo con mayores tasas de mortalidad a causa de esta enfermedad, la obesidad no es un problema menor en esta área geográfica. No en vano, más de un 30% de la población adulta de México, Chile y Argentina es obesa. Los datos resultan aún más alarmantes cuando se considera el sobrepeso, es decir, personas con un índice de masa corporal entre 25 y 29,9 kilogramos. En concreto, la isla de San Vicente y las Granadinas es la más afectada, pues más de la mitad de su población tiene sobrepeso.
Lamentablemente, las cifras tampoco son esperanzadoras en el área infantil, con una prevalencia del sobrepeso del 8,6% entre menores de cinco años en 2022. A medio plazo, México y Brasil serán los más castigados, con más de seis millones de niños y adolescentes obesos de cara a 2030.
¿Cuáles son los países con mayor obesidad en Latinoamérica?
Los datos más recientes sitúan a México como uno de los países del continente con los índices más altos de adultos obesos, con cerca de un 36%. Las mujeres son quienes registran la mayor prevalencia con un 41%. Sin embargo, si se considera únicamente el sobrepeso, el género masculino encabeza esta condición.Para frenar el avance de esta pandemia, el país ha implementado una serie de medidas a partir de 2014. Entre ellas figuran, por ejemplo, la restricción de la publicidad de alimentos procesados en horarios infantiles de televisión y cine o la obligación a las empresas de proporcionar información clara y visible sobre el contenido de azúcares y grasas saturadas en alimentos y bebidas. A pesar de estas iniciativas, el impacto de la obesidad y el sobrepeso en la economía nacional será alto, pues se prevé que los costos asociados a este problema representarán un 5% del PIB en 2060.
Por su parte, en Argentina es preocupante el exceso de peso en la población joven. Más de un 30% de los adolescentes de entre 13 y 15 años tiene obesidad y sobrepeso, siendo los hombres los más propensos. En el futuro, se estima que el exceso de peso afectará a un 76% de la población masculina menor de 20 años.
En este contexto, en 2022 entró en vigencia una ley de etiquetado nutricional frontal que promueve la educación alimentaria en los colegios argentinos. En consecuencia, los alimentos y bebidas analcohólicas que contienen este sello de advertencia ya no podrán ser vendidos en las escuelas. No obstante, a pesar de las estrategias implementadas, la realidad es que la mayoría de los argentinos adultos con exceso de peso no han completado la primaria.
Bajar de peso no es sólo una cuestión de voluntad
Existen numerosos factores que contribuyen al aumento de peso como, por ejemplo, la genética familiar, una alimentación poco saludable, el sedentarismo o los malos hábitos del sueño, entre otros. El aspecto socioeconómico también desempeña un papel crucial, pues las personas con recursos limitados tienen un acceso más restringido a alimentos saludables y menos tiempo disponible para la actividad física.Aunque los cambios en las rutinas personales son el enfoque más común para la pérdida de peso, no todo se reduce a la voluntad individual, ya que seguir una dieta rica en verduras y frutas cuesta dinero. Según estudios recientes, todavía hay países donde un alto porcentaje de sus habitantes no tiene acceso a una dieta saludable debido al costo de los alimentos. En concreto, más de un 90% de la población haitiana se ve limitada a la hora de adquirir a alimentos frescos y densos en nutrientes. Asimismo, más de un 50% de las personas en Surinam y Jamaica enfrentan este problema. Y es que el importe medio diario de una dieta saludable en la región casi supera los cuatro dólares estadounidenses por persona.