Los desastres naturales en América Latina y el Caribe - Datos estadísticos
Las inundaciones son uno de los fenómenos naturales más frecuentes en Latinoamérica, con casi 600 ocurrencias entre 2000 y 2019. Sin embargo, los eventos que han causado mayores daños a las vidas de las personas son las sequías, afectando a 53 millones de sus habitantes en el mismo período. En cuanto al número de muertes, el terremoto en Haití en 2010 fue clasificado como el más mortífero, ya que más de 31.000 personas perdieron la vida. Según datos de la ONU, la implementación de sistemas de alerta y gestión de catástrofes por parte de los Gbiernos ha logrado reducir casi tres veces el número de incidentes a nivel global entre 1970 y 2019.
Terremotos en Chile y Perú
A diferencia de otros desastres naturales, los terremotos no se pueden prevenir, es decir, saber cuándo y dónde van a ocurrir. Identificar zonas seguras y rutas de evacuación es la única preparación que las personas pueden establecer para mitigar los daños. Este punto resulta clave en América Latina, una región especialmente propensa a sufrir volcanes y terremotos, debido a su localización en el Cinturón de Fuego del Océano Pacífico. No en vano, esta zona concentra el 85% de la actividad sísmica mundial —además de la mayor actividad volcánica del planeta— y cuenta con varias placas tectónicas en continuo movimiento que pueden producir terremotos si colisionan. Entre los países más afectados dentro de este círculo destacan Perú y Chile. Solo en 2022 registraron, respectivamente, cerca de 655 y 288 sismos con una magnitud igual o superior a 3,7 en la escala Richter, según datos facilitados por los centros sismológicos de sendos países.Cuando de magnitudes se habla, no puede evitarse mencionar el trágico terremoto sufrido por Chile en 1960, que encabeza el ranking de los más fuertes experimentados en el mundo en los últimos 100 años. Con una magnitud de 9,6 en la escala Richter, este mega sismo arrasó con la vida de 6.000 personas. De fuerza algo inferior (4,9), pero también catastrófico desde el punto de vista material, fue el vivido en 2017 en Valparaíso y Santiago —que tuvo más de 600 réplicas—.
Ahora bien, los terremotos no sólo se miden a partir de la energía liberada (Escala Richter) sino también a partir del efecto que genera en las vidas humanas y los daños estructurales (Escala Mercalli). En este sentido, Perú vivió uno de los peores terremotos de Latinoamérica en cuanto a número de muertes. En 1970, el país tuvo un sismo de grado IX en la escala de Mercalli que cobró la vida de más de 66.000 personas.
Venezuela: el país gravemente afectado por las inundaciones
Las inundaciones son un tipo de desastre natural hidrológico, generado principalmente por los desbordamientos de los ríos y torrentes, así como también por las lluvias torrenciales, los deshielos o las subidas de mareas. Los sistemas de alertas tempranas, las pólizas de seguros y los sistemas de protección social son elementos que pueden ayudar a las personas a responder más adecuadamente ante las crisis y recuperarse más rápidamente tras las inundaciones.A pesar de lo anterior, ningún sistema pudo prevenir las devastadoras inundaciones registradas en la historia reciente del continente. En 1999, la Tragedia de Vargas, ocurrida en las costas caribeñas de Venezuela, se cobró 10.000 víctimas fatales. Asimismo, este cataclismo ocasionó también los mayores daños materiales, con pérdidas estimadas en aproximadamente ocho millones de dólares estadounidenses.