A partir de los conflictos internacionales a nivel mundial y luego del impacto económico del COVID-19, el encarecimiento del costo de vida se ha convertido en una de las mayores problemáticas a nivel global, en parte impulsado por la aceleración de la inflación. En América Latina, esto no es una excepción, ya que el costo de vida es uno de los principales determinantes de la calidad de vida de los ciudadanos.
De acuerdo a un estudio reciente de Mercer, que clasifica las ciudades más caras para vivir en el mundo, cuatro ciudades de la región se ubicaron entre las 50 más costosas de las 227 que se analizaron. La ciudad latinoamericana más cara fue Ciudad de México, que alcanzó el puesto 33 en el ranking, seguida por San José, la capital de Costa Rica, en la posición 36. En Sudamérica, Montevideo, fue la urbe con el mayor costo de vida, situándose en el puesto 42 del ranking.
Un dato interesante, sin embargo, es que, aunque México, Costa Rica y Uruguay tienen algunas de las ciudades más caras de la región, un estudio reciente de Numbeo los ubicó como los países con la mejor calidad de vida en América Latina en 2025.