Inflación en América Latina - Datos estadísticos
Argentina y los problemas para salir de la inflación
El caso de Argentina es uno de los más interesantes. El Gobierno ha intentado activamente salir de un largo periodo marcado por tasas de inflación elevadas proponiendo desafortunadas medidas antiinflacionarias, que le han llevado ocupar los primeros puestos del ranking no solo de los países con mayor tasa de inflación de Latinoamérica, sino del mundo entero. Un ejemplo de ello es la restricción de exportaciones de la industria de cárnica, acción que no logró detener la inflación acelerada de los precios de cortes básicos en la dieta argentina. Además, durante los gobiernos de Macri y Fernández se generó una deuda externa superior al 45% del producto interno bruto (PIB) nacional.Por su parte, el nuevo gobierno de Milei ha implementado una política económica caracterizada por un drástica disminución del gasto público, reduciéndolo en un 41%, lo que representa el mayor recorte fiscal en los últimos 30 años del país. El constante aumento de los precios, que ha tenido un importante impacto en la capacidad de consumo de la población en general, ha afectado particularmente a aquellos hogares de menores ingresos. Este difícil contexto socioeconómico se ha reflejado en el crecimiento de las cifras de pobreza en el país, que actualmente registra uno de sus valores históricos más altos. Concretamente, la tasa para 2024 se eleva hasta el 57,4%, es decir, casi seis de cada diez argentinos se encuentran por debajo de la línea de pobreza.
Inflación crónica de Venezuela
Venezuela era, hasta hace poco, el país con la mayor tasa de inflación del mundo, con valores que no barajon del 1.000% hasta 2021, lo que generó un fenómeno económico conocido como inflación crónica. Esto se refiere al aumento generalizado y constante del nivel de precios que se mantiene por un largo periodo de tiempo. Existen varias razones en el contexto venezolano que causaron esta situación. Entre los motivos internos pueden considerarse la política monetaria descontrolada y el uso de emisión monetaria para financiar el gasto y la deuda pública. Entre los internos, destacan el rompimiento de las cadenas de suministro por la imposición de Estados Unidos de un cerco económico al gobierno de Nicolas Maduro, —lo que genera a su vez la escasez de factores de producción—.Aunque parece que a partir de 2022 se redujo la hiperinflación, no hay un panorama claro sobre cómo podría detenerse por completo, mucho menos después de la inestabilidad política y social generada tras los resultados de las últimas elecciones presidenciales, la cual impacta especialmente sobre el más de 50% de la población que vive en pobreza extrema.
El contexto latinoamericano
La región no se ha salvado del aumento de precios en el sector energético, con casos incontrolables como el de Argentina o Surinam. Ese aumento ha encarecido la producción y el costo de la canasta básica.Eso sí, no toda la incertidumbre económica de América Latina y el Caribe está relacionada directamente con aspectos energéticos o pandémicos. En años recientes, el descontento de la población con temas políticos y sociales ha crecido provocando amplios levantamientos y paros en países como Perú y Chile, entre muchos otros. Por su parte, en Venezuela, Cuba y Nicaragua, se suman las sanciones internacionales recibidas, que han limitado sus posibilidades de comercio internacional y han agravado la escasez de productos e de inversiones extranjeras.