¿Cuáles son los países con las mejores acciones contra el cambio climático? Esta es la pregunta a la que pretende dar respuesta el Índice de Desempeño frente al Cambio Climático (IDCC), elaborado por Germanwatch, NewClimate Institute y Climate Action Network. Publicado anualmente desde 2005, el estudio supervisa el desempeño de 63 países y la UE (responsables de más del 90% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero) en materia de protección del clima, comparando sus esfuerzos de protección climática y el progreso realizado. En concreto, analiza el desempeño de cada país en cuatro categorías: política climática, energías renovables, uso de la energía y emisiones de gases de efecto invernadero.
La última edición advierte que ningún país está en el buen camino para limitar el calentamiento del planeta a 1,5 °C y que la crisis energética pone de manifiesto que el mundo sigue dependiendo de los combustibles fósiles. De hecho, los tres primeros puestos del índice, que corresponderían a aquellos países con un desempeño “muy bueno” en materia de protección del clima, llevan vacantes desde 2008 y continúan estándolo este año, mientras que Dinamarca y Países Bajos se mantienen en el cuarto y quinto puesto, respectivamente, y Reino Unido sube 14 escalones con respecto a la anterior edición del estudio, situándose en sexto lugar.
Por otra parte, Irán, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos están en la cola del IDCC. El primero, que cierra la clasificación, es uno de los pocos países del mundo que aún no ha ratificado el Acuerdo de París y se encuentra entre los diez países del mundo con mayores reservas de gas desarrolladas.
Por su parte, España ha bajado una posición este año situándose en el puesto número 19 y obteniendo la calificación de rendimiento “moderado” en las cuatro categorías que analiza el índice.
China y Estados Unidos, las dos principales potencias emisoras del mundo, figuran entre los países con las políticas de protección climática menos robustas. El primero ha bajado cuatro posiciones, situándose en el puesto 55 con la calificación de rendimiento "muy pobre" por el aumento de sus inversiones en combustibles fósiles y pese a su alto desarrollo en vehículos eléctricos. Estados Unidos mantiene su puesto gracias a "un aumento de la capacidad de energía eólica y solar desde la Ley de Reducción de la Inflación de la administración de Joe Biden, que ha dado lugar a inversiones e incentivos masivos". El país, segundo mayor emisor del mundo, ocupa el puesto 57 en el ranking.