Cada 14 de junio se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre, con el objetivo de generar conciencia sobre la necesidad de disponer de sangre y productos sanguíneos seguros para transfusiones y poner de relieve la contribución que efectúan los donantes voluntarios.
Hay cuatro tipos distintos de sangre: A, B, O y AB, y cada uno de ellos puede ser positivo o negativo, dependiendo de la presencia (o no) del llamado antígeno “Rh” en la superficie de los glóbulos rojos. Cada grupo sanguíneo tiene cualidades diferentes. Por ejemplo, los del tipo O- son donantes universales: pueden donar sangre a cualquier persona. En cambio, los AB+ son receptores universales, por lo que pueden recibir donaciones de cualquier grupo.
Como muestra este gráfico de Statista, el grupo más común en el mundo en 2024 es el O+. Mientras tanto, la mayoría de la población de Europa tiene sangre A+. Sólo dos países de los registrados en el World Population Review tienen una mayor proporción de grupos sanguíneos B+: Pakistán y Bangladesh.
Los países con la preponderancia más clara de un determinado grupo sanguíneo son todos del tipo de sangre O+, con el 75% de la población de Ecuador, seguido del 70% de Perú y el 63% de Zimbabwe.