La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha presentado su informe semestral de Perspectivas Económicas, en el que recorta las previsiones de crecimiento mundial. Según los pronósticos de la entidad, la economía global se expandirá un 3% este año, lo que supone una reducción de 1,5 puntos respecto a la previsión de diciembre, cuando estimaba un crecimiento del 4,5%. Según el informe, “el conflicto en Ucrania y perturbaciones en la cadena de suministro, agravadas por los cierres de empresas y fábricas en China en el marco de la política de ‘COVID cero’, están asestando un duro golpe a la recuperación”.
Muchos de los países más castigados están en Europa, una región, según la OCDE, “muy expuesta a la guerra a través de las importaciones de energía y los desplazamientos de refugiados”. En concreto para España, la organización ha recortado 1,4 puntos, hasta el 4,1%, su previsión de crecimiento del PIB en 2022, debido al aumento de la incertidumbre, la elevada inflación y la desaceleración de la demanda externa. Pese a la corrección a la baja, el PIB español avanzará más que el de países europeos como Francia (2,4%) o Alemania (1,9%).
Al otro lado del Atlántico, Estados Unidos experimentará en 2022 una expansión del 2,5%, frente al 3,7% pronosticado en diciembre. En América Latina, destaca Colombia, con un alza estimada del PIB del 6,1% este año, siendo el consumo privado el principal motor de la recuperación, alimentado por un repunte gradual del empleo, según la entidad. En cambio, la expansión de la economía brasileña se frenará "significativamente" en 2022, pues se prevé un crecimiento de sólo el 0,6 % como consecuencia de la elevada inflación y el aumento de los intereses.