La compañía de software Kaseya sufrió el pasado viernes un ciberataque tipo ransomware que acabó afectando a cientos de empresas de todo el mundo. Se cree que el responsable del ataque es el grupo de hackers REvil, que está pidiendo 70 millones de dólares de rescate para restaurar los datos de las empresas afectadas.
El ransomware (secuestro de datos) es una de las mayores amenazas de la tecnología mundial. En estos ataques, los hackers intervienen los sistemas y piden a sus víctimas un pago, a menudo en criptomonedas, por desbloquearlos. Según datos de chainalysis.com, en 2020 se produjo un considerable aumento del volumen de pagos en criptomonedas realizados a los atacantes de ransomware. En concreto, las víctimas de ransomware pagaron más de 406 millones de dólares en Bitcoin Cash, Bitcoin, Ethereum y Tethera a los atacantes, cifra que los analistas de chainalysis.com aseguran que seguirá creciendo a medida que descubran más direcciones de ransomware receptoras de estos pagos. En 2021, hasta el 10 de mayo, se calcula que los grupos de ransomware han recaudado al menos 81 millones de dólares en criptomonedas de sus víctimas.