El cáncer en el mundo - Datos estadísticos
Cánceres más mortíferos
Que la neoplasia está ligada a la contaminación atmosférica y a hábitos poco saludables como el excesivo consumo de tabaco o alcohol no es nada nuevo. De hecho, el cáncer de pulmón tiene mayor incidencia a nivel mundial que ningún otro, seguido por el de mama. A día de hoy, ambos representan en conjunto aproximadamente el 25% de los nuevos casos diagnosticados y se espera que esta cifra casi se duplique durante las dos próximas décadas. Eso sí, existe una notable diferencia entre géneros, ya que el de pulmón toma la delantera entre la población masculina.
El patrón se repite con las cifras de mortalidad, donde además el carcinoma broncogénico encabeza tan trágico ranking. En el caso de los hombres, el porcentaje se sitúa incluso por encima del 20%, eclipsando al resto. No ocurre lo mismo con las féminas, entre las que los tumores mamarios malignos causan mayores estragos. Pero independientemente del tipo de cáncer, lo que queda claro es que las proyecciones no son nada esperanzadoras, con un incrementos previstos de los decesos para ambos sexos.
Asía, el continente más castigado
Si bien se trata de un mal global, no impacta igual en todos los rincones del globo terrestre. Ya sea por causas endógenas o exógenas, lo cierto es que Asia es la región más castigada tanto a nivel de incidencia como de mortalidad. De esta forma, China e India se posicionan primera y tercera respectivamente en el listado de naciones con mayor incidencia, ya que a sus espaldas cargan con más del 30% de las nuevas detecciones. Entre ellas sólo se interpone Estados Unidos, con un 11,9%. En cuanto al número de muertes, la nación presidida por Xi Jinping mantiene su desabrido liderazgo, mientras que la India adelanta al país de las oportunidades y se coloca en segunda posición. Los dos gigantes asiáticos juntos contabilizaron la friolera de 3,4 millones de decesos en 2022, es decir, casi un 36% sobre el total. Ahora bien, de cara al futuro, son los Estados de la península arábiga los que presentan un panorama más preocupante, con tasas de incremento entre 2022 y 2050 superiores al 200% en el caso de la incidencia y hasta de un 544% cuando se habla de mortalidad.