Ipsos ha publicado recientemente una encuesta, llevada a cabo en 30 países -de los cuales el siguiente gráfico de Statista ofrece una selección-, con la que busca conocer la percepción ciudadana sobre la posibilidad de llegar a la nueva normalidad en los próximos meses.
En los 30 países contemplados en el estudio, de media, un 59% de los encuestados cree que es factible volver a tener una vida similar a la que disfrutaba antes de la pandemia en los próximos 12 meses. Los países con campañas de vacunación más avanzadas, como Reino Unido, Estados Unidos o Chile se situaron por encima del promedio. Sin embargo, esto es algo que los españoles no ven posible en ese periodo de tiempo, ya que casi la mitad (45%) considera que pasará más de un año hasta volver a la situación previa al coronavirus. Esto sitúa a España como el segundo país europeo más pesimista en lo que respecta a la vuelta a la normalidad, tan solo por detrás de Italia (47%). Francia (44%), Turquía (44%), Corea del Sur (45%) y especialmente Japón (66%) son los otros países del estudio donde un porcentaje más elevado de encuestados cree que el impacto de las restricciones en su vida cotidiana durará más de 12 meses.
De los países de América Latina incluidos en el estudio, Perú (34%) es el que tiene la proporción más alta de personas que piensan que la vuelta a la normalidad tardará más de un año en producirse, mientras que Brasil (29%) es el que la tiene más baja, a pesar de ser el tercer país del mundo con más casos de COVID-19 registrados y el segundo en número total de fallecidos.
No es de extrañar que China sea uno de los países más optimistas de la encuesta. El 17% de los encuestados chinos afirmó que su vida ya había vuelto a la normalidad, mientras que el 60% cree que la COVID-19 será cosa del pasado antes de que pase un año.