Aproximadamente 42 millones de personas en toda Europa, el 9,3% de la población de la Unión Europea, no pudieron permitirse calentar sus hogares de forma adecuada en 2022, según revela una encuesta de Eurostat, la oficina estadística de la Unión. El estudio señala que la capacidad para mantener una casa adecuadamente caliente depende de una serie de factores incluido el estado general del edificio, la temperatura exterior y el costo de la energía.
La situación fue ligeramente mejor en 2020 y 2021, años en los que la pobreza energética afectó al 8% y al 6,9% de los ciudadanos de la UE, respectivamente, pero en los últimos meses el aumento sin precedentes de los precios de la energía y la invasión rusa de Ucrania han provocado más dificultades para aún más personas.
Los ciudadanos de la UE que más problemas tuvieron para mantener caliente su vivienda en 2022 fueron los búlgaros, pues cerca de una cuarta parte de la población (22,5%) afirmó no poder hacerlo. En España el porcentaje se situó en el 17,1%, también por encima de la media. Este dato supuso un incremento de 2,9 puntos porcentuales frente a 2021, cuando el 14,2% de la población española afirmaba encontrarse en esta situación. La tasa más baja entre los países de la UE para los que hay información se registró en Finlandia (1,4%).