Panamá, la economía más sana de Latinoamérica
Latinoamérica
Tras la crisis de 2018, la mayoría de Estados han centrado sus esfuerzos en el crecimiento económico, medido tradicionalmente a través del PIB per cápita, el empleo y la productividad. Sin embargo, en este camino hacia la recuperación algunos países han olvidado otros factores importantes como la desigualdad de la riqueza, la deuda pública, la renta media de la población o el agotamiento de los recursos naturales. Todos ellos, según el Fondo Económico Mundial, indicadores clave a la hora de determinar si una economía está progresando de una forma sana e inclusiva. Por ello, la organización internacional creó el Índice de Desarrollo Inclusivo (IDI), mediante en el que anualmente analiza el estado de bienestar en el que se encuentran un total de 103 Estados.
Latinoamérica está dominada por las economías emergentes. Pese a esta realidad, como muestra esta infografía de Statista, en los últimos cinco años algunos países han avanzado hacia un mayor crecimiento económico y una mayor inclusión social. En concreto, Panamá, que es la economía latinoamericana más sana con un IDI de 4,54 sobre 7, experimentó además el mayor crecimiento medio dentro de esta región: un 4,8% entre 2012 y 2016. Costa Rica y Perú, sin embargo, que se situaron en la cuarta y quinta posición respectivamente con un IDI de alrededor del 4,3, vieron como su resultado general disminuyó en el pasado quinquenio. Esto se debió a una reducción de los ingresos netos y de las condiciones sanitarias de su población.
Latinoamérica está dominada por las economías emergentes. Pese a esta realidad, como muestra esta infografía de Statista, en los últimos cinco años algunos países han avanzado hacia un mayor crecimiento económico y una mayor inclusión social. En concreto, Panamá, que es la economía latinoamericana más sana con un IDI de 4,54 sobre 7, experimentó además el mayor crecimiento medio dentro de esta región: un 4,8% entre 2012 y 2016. Costa Rica y Perú, sin embargo, que se situaron en la cuarta y quinta posición respectivamente con un IDI de alrededor del 4,3, vieron como su resultado general disminuyó en el pasado quinquenio. Esto se debió a una reducción de los ingresos netos y de las condiciones sanitarias de su población.