El 2 de abril se celebra el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo.
El diagnóstico del Trastorno del Espectro Autista (TEA) varía significativamente en distintos países, como se refleja en los datos de World Population Review sobre la prevalencia de autismo infantil por cada 100.000 niños. Los países con mayor número de diagnósticos incluyen Singapur (1.460), Japón (1.450) y Chile (1.060), mientras que aquellos con tasas más bajas incluyen China (638) y Brasil (606). Estas diferencias pueden estar influenciadas por diversos factores, como el acceso a servicios de salud, metodologías de diagnóstico y niveles de concienciación pública.
Una mayor prevalencia de diagnósticos en ciertos países no significa necesariamente que haya más casos de autismo, sino que pueden contar con sistemas de salud más eficaces para detectarlo. En lugares como Singapur y Japón, donde el acceso a la salud y la concienciación sobre el TEA son elevados, los diagnósticos tienden a ser más frecuentes. Por otro lado, países con menos recursos médicos o con menor sensibilización sobre el autismo pueden reportar cifras más bajas debido a subdiagnósticos.
Según la Clínica Mayo, el TEA es "una afección relacionada con el desarrollo del cerebro que afecta la manera en la que una persona percibe y socializa con otras personas, lo que causa problemas en la interacción social y la comunicación. El trastorno también comprende patrones de conducta restringidos y repetitivos". El término "espectro" hace referencia a un amplio abanico de síntomas y gravedad. De acuerdo con el Instituto, "si bien no existe una cura para los trastornos del espectro autista, un tratamiento intensivo y temprano puede hacer una gran diferencia en la vida de muchos niños".