El terrorismo - Datos estadísticos
Hace apenas dos años que se cumplió el vigésimo aniversario de los atentados del 11-S, que se convirtieron en uno de los principales detonantes de la declaración de guerra contra el terror yihadista por parte de los Estados Unidos. El atroz suceso protagonizado por Al-Qaeda en 2021 se cobró la vida de casi 3.000 personas y causó unas pérdidas materiales por valor de miles millones de dólares estadounidenses.
Tan solo una semana más tarde, el 18 de septiembre, el presidente de los Estados Unidos en aquel momento, George W. Bush, se propuso cercar en Afganistan a Al-Qaeda y a su líder, Osama Bin Laden, a través de una operación bautizada como "Libertad Duradera", con el respaldo del Reino Unido, Canadá, Alemania, Australia y Francia. Los bombardeos comenzaron el 7 de octubre contra unas fuerzas terroristas que se debilitaron rápidamente. El 5 de diciembre, después de la caída de Kabul, la ONU reunió a las distintas facciones afganas en la ciudad alemana de Bonn y, tras arduas negociaciones, Hamid Karzai fue instaurado como líder del comité interino del país.
Terrorismo religioso
A pesar de la inminente derrota de los talibanes y Al-Qaeda en 2001 por parte de las tropas estadounidenses y sus aliados en Afganistán, el yihadismo nunca dejó de estar vivo ni en Oriente Medio ni en el resto del mundo. De hecho, Irán y Afganistán han sido dos de los países más golpeados por las actividades terroristas de este movimiento religioso y en Europa han tenido lugar en la última década diversos atentados en ciudades como París, Bruselas, Madrid o Londres. Por ello, no es de extrañar que en entre 2015 y 2020 se hayan llevado a cabo solo en la Unión Europea más de 3.300 arrestos relacionados con el terrorismo religioso.
Asimismo, los terroristas religiosos causan estragos en otros continentes como el africano, donde tres grupos suenan con fuerza: Boko Haram, el Ash-Shabab y Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI).
Política, narcotráfico y terrorismo
Pero el terrorismo por causas religiosas no es el único vigente. Muy por el contrario, existen otras variantes fundamentadas en la política o el narcotráfico que también afectan actualmente a infinidad de países.
En cuanto al ámbito político, gran parte de los grupos terroristas no islamistas tienen sus raíces en las ideas marxistas-leninistas, que han calado muy hondo en países de Oriente Medio y Latinoamérica. Así, por ejemplo, en Oriente Medio dos son los principales grupos abanderados de esta ideología: el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK).
El primero de ellos sigue todavía activo y se trata una organización revolucionaria laica fundada en 1967 por George Habash, compuesta por palestinos seculares. En 1969 el FPLP se declaró como una organización marxista-leninista, aunque sin abandonar el panarabismo, ya que consideraba el conflicto palestino como parte de un levantamiento más amplio contra el imperialismo occidental. Ahora bien, temen un estado islámico como el propuesto por Hamas y la Yihad Islámica.
En cuanto al PKK, lucha por la independencia del Kurdistán y su brazo armado se denomina Unidades de Protección Popular (YPG). Su presidente, Abdullah Öcalan, fue condenado a cadena perpetua por delitos de terrorismo y separatismo por la justicia turca y permanece preso desde 1999.
Por su parte, en América Latina, muchos son los países que han tenido o aún tienen guerrillas activas orientadas principalmente a reorganizar la sociedad en líneas socialistas o marxistas-leninistas, retirar los intereses de la inversión extranjera, redistribuir los recursos y reivindicar los derechos de la población indígena. Entre los grupos terroristas más conocidos figuran los siguientes:
- Colombia
- Perú
- México
- Paraguay
A todo esto, hay que añadir la violencia y el terrorismo vinculado a los cárteles del narcotráfico, que muchas veces trabajan de forma conjunta con los grupos guerrilleros. Algunos de los más importantes son el Cártel del Pacífico, el Cartel del Golfo de México, el Cartel de Sinaloa, el Cártel de Jalisco, Calle 18 (también conocida como Barrio 18), Mara Salvatrucha (MS-13), Los Mendoza, Los Lorenzana o Primeiro Comando da Capital.
Tan solo una semana más tarde, el 18 de septiembre, el presidente de los Estados Unidos en aquel momento, George W. Bush, se propuso cercar en Afganistan a Al-Qaeda y a su líder, Osama Bin Laden, a través de una operación bautizada como "Libertad Duradera", con el respaldo del Reino Unido, Canadá, Alemania, Australia y Francia. Los bombardeos comenzaron el 7 de octubre contra unas fuerzas terroristas que se debilitaron rápidamente. El 5 de diciembre, después de la caída de Kabul, la ONU reunió a las distintas facciones afganas en la ciudad alemana de Bonn y, tras arduas negociaciones, Hamid Karzai fue instaurado como líder del comité interino del país.
Terrorismo religioso
A pesar de la inminente derrota de los talibanes y Al-Qaeda en 2001 por parte de las tropas estadounidenses y sus aliados en Afganistán, el yihadismo nunca dejó de estar vivo ni en Oriente Medio ni en el resto del mundo. De hecho, Irán y Afganistán han sido dos de los países más golpeados por las actividades terroristas de este movimiento religioso y en Europa han tenido lugar en la última década diversos atentados en ciudades como París, Bruselas, Madrid o Londres. Por ello, no es de extrañar que en entre 2015 y 2020 se hayan llevado a cabo solo en la Unión Europea más de 3.300 arrestos relacionados con el terrorismo religioso.
Asimismo, los terroristas religiosos causan estragos en otros continentes como el africano, donde tres grupos suenan con fuerza: Boko Haram, el Ash-Shabab y Al Qaeda del Magreb Islámico (AQMI).
Política, narcotráfico y terrorismo
Pero el terrorismo por causas religiosas no es el único vigente. Muy por el contrario, existen otras variantes fundamentadas en la política o el narcotráfico que también afectan actualmente a infinidad de países.
En cuanto al ámbito político, gran parte de los grupos terroristas no islamistas tienen sus raíces en las ideas marxistas-leninistas, que han calado muy hondo en países de Oriente Medio y Latinoamérica. Así, por ejemplo, en Oriente Medio dos son los principales grupos abanderados de esta ideología: el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y el Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK).
El primero de ellos sigue todavía activo y se trata una organización revolucionaria laica fundada en 1967 por George Habash, compuesta por palestinos seculares. En 1969 el FPLP se declaró como una organización marxista-leninista, aunque sin abandonar el panarabismo, ya que consideraba el conflicto palestino como parte de un levantamiento más amplio contra el imperialismo occidental. Ahora bien, temen un estado islámico como el propuesto por Hamas y la Yihad Islámica.
En cuanto al PKK, lucha por la independencia del Kurdistán y su brazo armado se denomina Unidades de Protección Popular (YPG). Su presidente, Abdullah Öcalan, fue condenado a cadena perpetua por delitos de terrorismo y separatismo por la justicia turca y permanece preso desde 1999.
Por su parte, en América Latina, muchos son los países que han tenido o aún tienen guerrillas activas orientadas principalmente a reorganizar la sociedad en líneas socialistas o marxistas-leninistas, retirar los intereses de la inversión extranjera, redistribuir los recursos y reivindicar los derechos de la población indígena. Entre los grupos terroristas más conocidos figuran los siguientes:
- Colombia
- Fuerzas Armadas Revolucionarias Colombianas (FARC): representan el brazo armado del Partido Comunista Colombiano. Durante su historia, han sufrido bastantes perdidas, pero en 2020 experimentaron un repunte volviendo a ganar peso en el país. Existen sospechas no confirmadas de vinculaciones entre las FARC y las bandas de narcotraficantes para obtener dinero y armamento.
- Ejército de Liberación Nacional (ELN). Nació en 1964, inspirado en la revolución cubana con la intención luchar contra la pobreza y las desigualdades. El Estado colombiano y el ELN han intentado varias veces, sin éxito, poner término al conflicto. La primera, a comienzos de los noventa, con el entonces presidente César Gaviria (1990-94). La segunda, con Álvaro Uribe (2002-2010). Y la tercera, en 2017, con Juan Manuel Santos (2010-2018). El actual presidente, Iván Duque, interrumpió los diálogos con el ELN tras un ataque con coche bomba contra una academia de Policía en Bogotá, en enero de 2019, aunque el ELN descartó su participación.
- Perú
- Sendero Luminoso (SL). Organización terrorista en contra del gobierno de Perú y los Estados Unidos que sigue las enseñanzas clásicas de Mao Tse-Tung. Proclaman que los líderes por derecho de Perú son los indígenas. Si bien ha ido perdiendo fuelle, siguen realizando atentados en el Valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), en colaboración con los cárteles del narcotráfico.
- México
- Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Protagonizó un levantamiento armado de guerrilleros indígenas en Chiapas en 1993. Liderados por el llamado “subcomandante Marcos”, reclamaban mejores condiciones de vida para los pueblos indígenas. Concretamente, se oponían a la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y a las políticas neoliberales con las que el país era gobernado en aquel momento. Sin embargo, esta revolución fracasó y la guerrilla se replegó hacia la selva. A día de hoy quedan solo algunos guerrilleros armados en el estado de Chiapas.
- Paraguay
- Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP). Se trata de un grupo armado de inspiración marxista-leninista que opera en el norte de Paraguay. Surgido en 2008, lucha por una reforma agraria y se financia principalmente a través de secuestros, extorsiones y venta ilegal de marihuana. La fuerza de Tarea Conjunta (FTC) es el cuerpo mixto policial y militar que combate al EPP.
A todo esto, hay que añadir la violencia y el terrorismo vinculado a los cárteles del narcotráfico, que muchas veces trabajan de forma conjunta con los grupos guerrilleros. Algunos de los más importantes son el Cártel del Pacífico, el Cartel del Golfo de México, el Cartel de Sinaloa, el Cártel de Jalisco, Calle 18 (también conocida como Barrio 18), Mara Salvatrucha (MS-13), Los Mendoza, Los Lorenzana o Primeiro Comando da Capital.
