Tras el episodio del globo espía chino que atravesó Estados Unidos antes de ser derribado frente a las costas de Carolina del Sur la semana pasada, el ejército estadounidense abatió tres objetos voladores no identificados sobre Alaska, Canadá y Míchigan el fin de semana, desatando la preocupación y el debate sobre lo que está ocurriendo en los cielos.
Aunque las autoridades estadounidenses todavía están tratando de averiguar qué eran los objetos voladores derribados el fin de semana y para qué servían, puede haber una explicación sencilla de por qué de repente parece haber una avalancha de objetos voladores no identificados sobre Estados Unidos. A raíz de la notoria incursión del globo chino, el ejército estadounidense está muy atento para vigilar el espacio aéreo y señalar objetos que antes podrían quizá haber pasado desapercibidos.
"A la luz del programa de globos chinos y de esta reciente incursión en nuestro espacio aéreo, los Estados Unidos y Canadá, a través del NORAD, han estado examinando más de cerca ese espacio aéreo, incluida la mejora de nuestras capacidades de radar, lo cual —como dijo anoche el comandante del NORTHCOM y del NORAD, el general VanHerck— puede explicar al menos en parte el aumento de los objetos que se han detectado", dijo el coordinador del Consejo de Seguridad Nacional para Comunicaciones Estratégicas, John Kirby, en una rueda de prensa en la Casa Blanca el lunes.
Sin embargo, los objetos voladores no identificados o fenómenos aéreos no identificados (FANI), como se les denomina oficialmente, no son nada nuevo. De hecho, la Oficina del Director de Inteligencia Nacional de Estados Unidos publicó el mes pasado un informe desclasificado sobre el tema, en el que se muestra lo frecuentes que son los avistamientos y los reportes sobre los FANI. Entre marzo de 2021 y agosto de 2022, las autoridades recibieron 366 reportes de FANI, más de la mitad de los cuales presentaban "características poco destacables". 26 se clasificaron como sistemas aéreos no tripulados (en su mayoría drones), 163 se caracterizaron como globos o entidades similares a globos y seis se atribuyeron al llamado desorden aéreo, que incluye aves, fenómenos meteorológicos o residuos aéreos como bolsas de plástico. Cuando se publicó el informe, aún quedaban 171 FANI por caracterizar, pero el informe afirma que algunos de ellos "parecen haber demostrado características de vuelo o capacidades de rendimiento inusuales y requieren un análisis más detallado".