El próximo sábado 3 de julio entra en vigor la directiva europea que prohíbe la comercialización de ciertos productos de plástico de un solo uso en el conjunto de la UE. Bastoncillos, cubiertos, platos, pajitas, recipientes y vasos de plástico son algunos de los productos cuya venta quedará prohibida, con el objetivo de reducir el consumo de plásticos y sustituirlo por materiales más sostenibles y reciclados.
Según datos de la asociación Plastics Europe, en 2019 la producción de plásticos en el mundo alcanzó los 368 millones de toneladas, nueve toneladas más que en el año anterior. En Asia se produjeron algo más de la mitad de los plásticos del mundo (un 51%). China, que en 2019 fue el país que más residuos plásticos de un solo uso generó, fue responsable del 31% de la producción mundial de plásticos, fabricando 82 kg per cápita, mientras que Japón, con solo el 3% de la producción mundial, logró producir 88 kg. En los países del TLCAN (actual T-MEC), es decir, Canadá, Estados Unidos y México, solo se produjo el 19% del plástico mundial en total. Sin embargo, esto equivale a 141 kg per cápita, la cifra más alta por persona.