Los empleados de todo el mundo sufren niveles históricos de estrés, están poco comprometidos con su trabajo y cada vez se pelean más con sus jefes. Esto se desprende de la encuesta 'State of the Global Workplace 2023 Report' (Informe 2023 de la situación del lugar del trabajo en el mundo) realizada por Gallup en más de 160 países.
El problema del estrés es probablemente el más notable del estudio, ya que se mantiene en niveles máximos. En todo el mundo, el 44% de los empleados encuestados en 2022 dijeron que experimentaron mucho estrés en el trabajo el día anterior, lo que coincide con los resultados de la encuesta del año previo, manteniéndose el estrés de los trabajadores en un nivel récord y continuando una “tendencia de elevado estrés que comenzó casi una década antes”.
Aunque en el estudio no se revela qué factores están contribuyendo a ese estrés, pues Gallup no lo pregunta, el informe sí plantea la hipótesis de que factores internos, como el propio trabajo y el bajo compromiso, sumados a factores externos, como la inflación, pueden estar elevando los niveles de estrés.
El estrés diario de los empleados aumentó en 2020 con la pandemia de coronavirus, debido al “cierre global de fronteras, el cierre de centros de trabajo y la reducción de puestos de trabajo”. En concreto, el 43% de los encuestados aseguraron entonces haber experimentado mucho estrés durante el día anterior, mientras que este porcentaje era del 38% en 2019.
Aunque el estrés a nivel mundial se mantuvo el año pasado en cifras récord, no todas las regiones del mundo experimentaron los mismos niveles. Según Gallup, los trabajadores de Estados Unidos y Canadá, así como los de Asia Oriental, registraron los niveles más altos de estrés diario a nivel global (52%), mientras que en América Latina y el Caribe (41%) y en Europa (39%) el estrés declarado fue menor. En todo el mundo, el estrés fue mayor entre los trabajadores jóvenes y los que trabajan exclusivamente en lugares remotos o híbridos.