La infancia y los medios de comunicación en España - Datos estadísticos
Ahora bien, los menores no solo acceden a Internet para ver contenido emitido previamente en una cadena televisiva. Es más, dentro del 84% de niños que lo utilizan por ocio y entretenimiento son mayoría los que optan por los vídeos graciosos y los videoclips. La presencia de los vídeos musicales entre las preferencias de este grupo demográfico no sorprende especialmente debido al alto nivel de alcance de la música en esta franja de edad, si bien predomina levemente entre las mujeres. Eso sí, tanto unos como otras coinciden en su preferencia por la última canción del cantante de moda frente a una pieza de Mozart. Y es que, si acuden a un concierto de música clásica será seguramente acompañados por su profesor como parte de una actividad escolar.
En cuanto a los libros, las nuevas tecnologías no parecen haber afectado demasiado a los hábitos de lectura de los más pequeños, que continúan decantándose por el soporte tradicional. Los videojuegos, no obstante, son uno de los mayores rivales a batir por parte del mercado editorial. Y es que los menores de 6 a 13 años dedican ya entre el 8% y el 14% de su tiempo frente a dispositivos a jugar a la consola.
El cine, por su parte, parece tener una notable acogida entre la población infantil. Si bien su tasa de penetración a nivel general lleva años por debajo del 5%, en el caso de los menores de 10 a 14 años se aproxima al 90%, acudiendo la mayoría de ellos con su familia o amigos e incluso solos. Seguramente, este hecho esté vinculado con la creciente oferta de animación en la cartelera nacional que, aunque no va orientada únicamente a los más pequeños, tiene en ellos uno de los factores clave de su éxito en taquilla.
Pero, sin duda, uno de los principales temas de debate en lo que respecta a la infancia y los medios de comunicación es el tratamiento de los menores en la prensa. Aun cuando queda todavía mucho trabajo por delante, los avances logrados en esta materia en los últimos años han sido notables. De hecho, son pocas las noticias en los medios impresos y digitales que vulneran el derecho al honor y la intimidad de los menores o que utilizan a los niños como fuentes de información. Pese a ello, todavía existe una proporción relativamente elevada de artículos sobre la infancia con carencia de rigor informativo.