Del 21 de noviembre al 18 de diciembre se celebra en Catar una nueva edición de la mayor fiesta del fútbol: la Copa Mundial de la FIFA 2022. Los inicios de esta competición, a la que la organización destina la mayor parte de su presupuesto, se remontan a 1930 y desde entonces se ha llevado a cabo de forma regular cada cuatro años, lo que convierte al torneo catarí en el número 22. Ahora bien, pese a que la cantidad de Copas del Mundo supera la veintena, se trata de la primera vez que la sede de este evento es una nación árabe y solo la segunda ocasión en la que llega al continente asiático, curiosamente cuando se cumplen dos décadas desde aquel Mundial de Japón y Corea del Sur en 2002. A todo esto, se añade el hecho de que nunca antes había tenido lugar tan tarde en el año, siendo la época estival la habitual fecha escogida. ¿La razón de este cambio? El clima extremo del verano en Catar.
Pero el camino de Catar tras haber sido elegido para albergar la Copa Mundial de 2022 aquel diciembre de 2010 no ha estado, ni mucho menos, libre de obstáculos. De hecho, el comité al frente de la candidatura catarí se enfrentó a acusaciones de haber obtenido los derechos mediante corrupción, soborno y engaño. Esto obligó a la FIFA a iniciar una investigación interna, cuyo informe final concluyó la ausencia de irregularidades por parte del país árabe. Una vez superado este temporal, vendría otro en forma de intensas críticas a comienzos de 2021 debido al trato dado a los trabajadores migrantes en la construcción de los estadios. Es más, según una encuesta realizada en abril de dicho año, dos tercios de la opinión pública estaba a favor de boicotear la celebración del torneo tras conocerse el fallecimiento de al menos 6.500 trabajadores, la mayoría de ellos procedentes de Bangladés y Nepal.
Uno de los nombres que más se echará en falta será el de Italia. La "Azzurra”, después de ganar la última Eurocopa en 2020, celebrada en 2021 tras haber sido pospuesta debido a la pandemia de COVID-19, sufrió el inesperado revés de perder en la repesca contra la selección de Macedonia del Norte y quedar, por segunda vez consecutiva y tercera vez en su historia, fuera de la Copa del Mundo. Por el contrario, algunas selecciones se estrenarán en el casillero de participaciones en el campeonato, como Catar, clasificado automáticamente en calidad de anfitrión, mientras que otros equipos, como Gales, volverán a tener su oportunidad tras 64 años sin clasificarse.
A fecha de 13 de octubre de 2022, se habían vendido ya cerca de tres millones de entradas, quedando alrededor de unas 200.000 todavía disponibles, según las declaraciones en rueda de prensa de Colin Smith, director de operaciones de la Copa Mundial de la FIFA. Aproximadamente el 40% de dichas ventas se registraron en el país anfitrión. De esta forma, Catar se convierte, por ahora, en la nación con mayor representación entre los asistentes. Estados Unidos y Arabia Saudí ocupan el segundo y tercer lugar respectivamente, superando ambos el umbral de los 120.000 tickets vendidos. En el top 10 se encuentran también tres países europeos –Inglaterra, Francia y Alemania-, tres latinoamericanos -México, Argentina y Brasil-, así como los Emiratos Árabes Unidos.
La nación anfitriona: Catar
Catar es una península en el Golfo Pérsico que limita con un único país al sur, Arabia Saudí, y con una población de aproximadamente tres millones de personas. Durante la duración del evento, ocho serán los estadios que alberguen los partidos de la Copa del Mundo, en su mayoría ubicados en la zona este. Todos ellos cuentan con una capacidad de al menos 40.000 espectadores, con los dos más grandes reservados para los momentos clave. Por un lado, el Al Bayt Stadium –con un aforo de unas 60.000 personas- acogerá el partido inaugural entre Catar y Ecuador. Por otro, el Lusail, también conocido como el Estadio Icónico de Lusail, dispondrá sus 80.000 butacas para la gran final.Pero el camino de Catar tras haber sido elegido para albergar la Copa Mundial de 2022 aquel diciembre de 2010 no ha estado, ni mucho menos, libre de obstáculos. De hecho, el comité al frente de la candidatura catarí se enfrentó a acusaciones de haber obtenido los derechos mediante corrupción, soborno y engaño. Esto obligó a la FIFA a iniciar una investigación interna, cuyo informe final concluyó la ausencia de irregularidades por parte del país árabe. Una vez superado este temporal, vendría otro en forma de intensas críticas a comienzos de 2021 debido al trato dado a los trabajadores migrantes en la construcción de los estadios. Es más, según una encuesta realizada en abril de dicho año, dos tercios de la opinión pública estaba a favor de boicotear la celebración del torneo tras conocerse el fallecimiento de al menos 6.500 trabajadores, la mayoría de ellos procedentes de Bangladés y Nepal.
Las novedades, los grandes favoritos y la gran ausencia
Tras la victoria de Francia en la final de Rusia 2018, el vigente campeón es actualmente uno de los favoritos para lograr su tercer título mundialista en Catar. Y es que la selección gala tiene entre sus filas al jugador más valioso del mercado futbolístico: Kylian Mbappé. El delantero del Paris-Saint Germain, mejor jugador joven de la anterior edición, está valorado actualmente en 160 millones. Sin embargo, pese al potencial individual de “les bleus”, lo cierto es que otras selecciones llegan al torneo con un mejor bagaje en sus últimos compromisos internacionales. Brasil, que ostenta a día de hoy el récord de títulos de la competición, viene de una excelente racha de logros deportivos que les ha valido el primer puesto en el ranking oficial de Selecciones de la FIFA. Otro de los equipos a considerar será el combinado argentino, que llegaba al 21 de noviembre con una racha de 35 partidos sin perder, con Messi como jugador estrella en el que todo apunta podría ser su último Mundial.Uno de los nombres que más se echará en falta será el de Italia. La "Azzurra”, después de ganar la última Eurocopa en 2020, celebrada en 2021 tras haber sido pospuesta debido a la pandemia de COVID-19, sufrió el inesperado revés de perder en la repesca contra la selección de Macedonia del Norte y quedar, por segunda vez consecutiva y tercera vez en su historia, fuera de la Copa del Mundo. Por el contrario, algunas selecciones se estrenarán en el casillero de participaciones en el campeonato, como Catar, clasificado automáticamente en calidad de anfitrión, mientras que otros equipos, como Gales, volverán a tener su oportunidad tras 64 años sin clasificarse.
¿Cuánto cuesta una entrada?
Unas de las cosas más ansiadas por los fanáticos del denominado deporte rey es poder asistir a alguno de los partidos disputados en los casi 30 días de competición, pero hacerse con una entrada nunca ha estado al alcance de todos los bolsillos y, en esta edición, mucho menos. Los precios han aumentado significativamente en las categorías superiores con respecto a Rusia 2018. Una entrada de la categoría 1 para el partido final cuesta 5.850 riyales cataríes, esto es, aproximadamente 1.607 dólares estadounidenses. Los tickets más baratos, como viene siendo habitual, corresponden a la categoría 4, reservados exclusivamente a los residentes locales. Para ellos, la posibilidad de ver en directo una de las citas de la fase de grupos tiene un coste de apenas 11 dólares, frente a los 220 que tienen que pagar aquellos visitantes extranjeros que deseen asegurarse una butaca en las mejores zonas del estadio. En el caso de los paquetes de entradas existentes para ver a una selección concreta, los precios oscilan entre los 227 dólares por tres tickets de categoría 3 para los enfrentamientos de la fase de grupos y los casi 4.800 dólares por siete entradas de categoría 1, que incluyen el partido inaugural, los cuartos de final, la semifinal y la final.A fecha de 13 de octubre de 2022, se habían vendido ya cerca de tres millones de entradas, quedando alrededor de unas 200.000 todavía disponibles, según las declaraciones en rueda de prensa de Colin Smith, director de operaciones de la Copa Mundial de la FIFA. Aproximadamente el 40% de dichas ventas se registraron en el país anfitrión. De esta forma, Catar se convierte, por ahora, en la nación con mayor representación entre los asistentes. Estados Unidos y Arabia Saudí ocupan el segundo y tercer lugar respectivamente, superando ambos el umbral de los 120.000 tickets vendidos. En el top 10 se encuentran también tres países europeos –Inglaterra, Francia y Alemania-, tres latinoamericanos -México, Argentina y Brasil-, así como los Emiratos Árabes Unidos.
